No obstante, todo llegó a mejor puerto un día después, el martes, luego de movilizar a Casa de Gobierno y entregar un petitorio y tras un nuevo encuentro con el defensor del Pueblo, Ricardo Riva, y las autoridades municipales (no así provinciales): por horas de la tarde, las familias decidieron levantar la toma ante la promesa de otra reunión el próximo martes. Fue exigencia municipal que frenara la ocupación.

Probablemente, el desgaste de esta tajante medida de fuerza que duró más de una semana también haya influenciado en la decisión de las familias, debido a que las condiciones propuestas por el Municipio no son tan distintas a las que rechazaban en primera instancia. Así y todo, este grupo de vecinos busca firmar un primer acuerdo para acceder a cuotas accesibles que le permitan construir sus viviendas. El martes 29 sería la reunión.

Por otra parte, otra problemática (no tan distinta a la anterior) de la realidad social de Neuquén tiene que ver con la desocupación que, esta última semana, se conoció que es la más alta de toda la Patagonia, justo la Provincia de Vaca Muerta a la cual le sobran recursos.

La desocupación de Neuquén durante el último trimestre de 2021 fue del 5,9 por ciento, que significa la más alta de la región patagónica, pero que al menos se traduce en una baja respecto al tercer trimestre del pasado año, donde era del 7 por ciento.

Desde el Gobierno de Omar Gutiérrez vieron la mitad del vaso lleno y salieron a destacar públicamente que se trata de dos años consecutivos en que la desocupación viene en baja: desde los 13,5 puntos porcentuales a este 5,9 por ciento actual. Lo que es un indicador positivo.

El propio gobernador sostuvo públicamente que “Neuquén ha recuperado 9 mil puestos de trabajo de los 12 mil que perdió de la actividad privada”. Además, la tasa de actividad se ubicó en el 45,7 por ciento, también a fines de 2021, en el conglomerado de Neuquén-Plottier y la tasa de empleo fue del 43 por ciento. Hubo un crecimiento del 0,5 y 1 por ciento, respectivamente.

En sintonía con esto, se conoció que Neuquén capital comienza la construcción de un polo tecnológico vinculado a la industria que según el intendente Mariano Gaido “va a generar trabajo, desarrollo económico, el crecimiento que necesita una gran capital”.

Mientras tanto, en este contexto provincial, ya comienzan a rumorearse posibles alianzas en la política neuquina de cara a 2023. ¿El peronismo le propondría a Rolando Figueroa ser candidato? El diputado que se impuso en la última interna del MPN ante el sector de Gutiérrez es bien visto, por lo menos, por Sergio Fernández Novoa del Frente de Todos. No obstante, desde el seno de “Rolo” salieron a desmentirlo.

En la vereda opuesta, el ex vicecandidato de Mauricio Macri, el peronista Miguel Ángel Pichetto se reunió con Jorge Sobisch y ya se empezó a alimentar una posible alianza entre Democracia Cristiana y el Peronismo Republicano. Incluso, a nivel local en el Concejo, ya existe una alianza entre Juntos por el Cambio y el partido del ex gobernador por lo que tampoco sería descabellado.

Lo que resultaría llamativo, aunque en política nada ya sorprende, sería la incorporación de Ramón Ríoseco a este tándem, según deslizó el ex diputado nacional de Juntos por el Cambio, Leandro López, a través de su cuenta de Twitter, no sería descabellado.

“Sobisch fue el mejor gobernador de la provincia en los últimos 25 años. Ramón Rioseco y Horacio “Pechi” Quiroga fueron los mejores intendentes de la Provincia en los últimos 25 años ¿Da para armar un Frente Amplio para ganarle al sapagismo y salir de la decadencia? ¡Obvio! ¡Re da!”, escribió López.

Faltan largos meses para conocer las posibles alianzas de cara a 2023, pero los primeros indicios están a la vista y aún resta conocer al nuevo presidente del Movimiento Popular Neuquino que podría catapultar (muy posiblemente) al próximo gobernador, sobre todo conociendo la historia del MPN en Neuquén que no pierde una elección desde 1962.