Francisco Baggio, subsecretario de Medioambiente y Protección Ciudadana, indicó que este miércoles, se instalaron cámaras trampa que se activan al detectar movimiento y que se suman a las jaulas que ya fueron colocadas en el área de la península.

“Compartimos las medidas de extremar los recaudos para evitar una situación que pueda poner el riesgo a la ciudadania o al animal”, dijo. En este sentido, aseguró que “tenemos la obligación de cuidar a los vecinos” por lo que el lugar permanecerá cerrado al menos hasta el viernes.

“Hay una barrera en el ingreso que indica que no se puede pasar, por lo tanto pedimos a las y los visitantes que respeten esta prohibición. Ojalá tengamos suerte con las cámaras trampa y las jaulas”, afirmó el funcionario.

Lucía Redondo, directora provincial de Áreas Naturales Protegidas y Fauna, detalló que se instalaron cinco cámaras en diferentes zonas del predio y mañana sumarán tres más. “A partir de las imágenes que se obtengan sabremos de qué estamos hablando: si es un puma o dos, si es un macho o una hembra”.

Además, indicó que esta mañana se registraron nuevas huellas que corresponderían con el animal y aseguró que este jueves, “en caso de que no haya resultados positivos instalaremos otro sistema que traemos del sur para buscar en un sector más grande”.

Por último, la funcionaria rescató que “todas las decisiones que se toman son en función de preservar a la ciudadanía y también a la fauna autóctona, porque ésta es una zona de presencia de puma, como lo es toda la Patagonia”.

En cuanto al operativo que se desplegará si se halla al animal, Santiago Akrich, veterninario, explicó que en ese caso se lo seda, “se le hace un control exhaustivo para determinar su estado físico y de salud, determinar si es silvestre o viene de algún otro lugar en cautiverio y se escapó. Una vez hechos los controles, se lo libera en una zona alejada de cualquier población que determine Fauna”.