Postergan definiciones claves sobre coparticipación y control de fondos en la Legislatura
En un clima de tensiones políticas, la Legislatura neuquina ha decidido aplazar la votación destinada a restituir el 1,5 por ciento de los fondos de coparticipación que le corresponden. Este movimiento se da en un contexto donde la vicegobernadora Gloria Ruiz ha manifestado su oposición a ceder el manejo de los recursos, lo que ha encendido los ánimos dentro de la Cámara.
El miércoles 13 de noviembre, las comisiones de Hacienda y Presupuesto, junto con Asuntos Constitucionales y Justicia, se reunieron para discutir un proyecto de ley presentado por el gobernador Rolando Figueroa.
El objetivo del proyecto era devolver ingresos por coparticipación federal, estimados en 11.200 millones de pesos, interrumpidos desde la sanción de la ley 3391, que instauró el Fondo de Estabilización de Presupuestos. Sin embargo, la reunión concluyó sin un acuerdo, ya que se priorizó definir la creación de un fondo anticíclico antes de proceder con la restitución de estos recursos.
Este fondo, con un monto inicial de 6.000 millones de pesos, tiene como meta compensar desviaciones inflacionarias y responder a contingencias económicas emergentes para el año 2025, superando una proyección inflacionaria del 18 por ciento. Durante la discusión, los legisladores enfatizaron la importancia de establecer límites claros en el uso de estos fondos, destacando que el verdadero propietario de ellos es el pueblo de Neuquén.
La falta de consenso es evidente. Varios diputados, como Ernesto Novoa (DC-Comunidad) y Francisco Lepore (Avanzar), han respaldado la postergación, defendiendo la necesidad de transparencia y restricción en la asignación de recursos. Por su parte, Gisselle Stillger (Arriba Neuquén) cuestionó la validez de un presupuesto que ya incluye fondos no recibidos y clamó por un enfoque más transparente. Otros representantes, como Darío Martínez (UxP), criticaron la falta de diálogo en el oficialismo, mientras que Guillermo Monzani (Hacemos Neuquén) acentuó una percepción de "ruptura de confianza" entre líderes políticos.
La situación destaca un conflicto persistente entre la vicegobernadora y los distintos bloques legislativos, ya que, aunque se había acordado la creación del fondo de emergencia, Ruiz busca mantener el control discrecional sobre su manejo. Sin una cláusula explícita que limite el uso de estos recursos para gastos específicos, se teme un desvío de su propósito original.
Con la mirada puesta en el futuro, los diputados buscan llegar a un entendimiento que permita avanzar hacia un manejo más claro y eficiente de los fondos, garantizando así que las necesidades de la población sean atendidas con la seriedad que amerita el contexto económico actual. La incertidumbre sobre la situación financiera de la Legislatura y la resolución de estas cuestiones clave continuarán siendo foco de atención en la agenda pública.