En un caso que ha capturado la atención de la comunidad neuquina, el fiscal Manuel Islas presentó ante un tribunal conformado por dos hombres y una mujer, su demanda para que un varón sea declarado responsable de abuso sexual infantil. Esta solicitud se produce en el contexto de un juicio que revisita un hecho que dejó una herida profunda en la víctima y su familia.
El supuesto abuso ocurrió entre el 14 y el 29 de enero de 2019, en el ámbito familiar donde el niño, que todavía no ha alcanzado la adolescencia, estaba de visita. Según la acusación, el imputado, quien era responsable del cuidado del pequeño, aprovechó la intimidad del entorno para cometer una atrocidad que quebró la confianza fundamental que un niño debe tener en un adulto.
El fiscal imputa al acusado el delito de abuso sexual con acceso carnal, con agravantes debido al vínculo familiar y a la posición de autoridad que el imputado ostentaba sobre la víctima. Esta categorización está sustentada en los artículos 119 y 45 del Código Penal argentino, los cuales afirman sin lugar a dudas los gravísimos cargos que enfrenta el denunciado.
El juicio está bajo la supervisión de la jueza Liliana Deiub, junto a los jueces Cristian Piana y Luis Giorgetti, quienes escucharon atentamente los alegatos de ambas partes. La defensa pidió la absolución del imputado, argumentando la falta de pruebas contundentes, mientras que la querella, apoyada por la Defensoría de los Derechos de Niñez y Adolescencia, enfatizó la necesidad de justicia para el pequeño afectado, sosteniendo la responsabilidad del acusado tal como lo propone la fiscalía.
Este proceso judicial es el segundo que enfrenta al imputado, dado que en un primer juicio fue absuelto por el beneficio de la duda. Sin embargo, la impugnación presentada por la fiscalía llevó a una revisión del caso, resumiendo que era imperativo repetir el juicio, esta vez con otros magistrados, reflejando así el compromiso del sistema judicial por garantizar que cada voz sea escuchada y cada verdad, revelada.
Tras la deliberación de los testimonios y los argumentos presentados, el tribunal se comprometió a emitir una sentencia en un plazo legal, dejando a la comunidad expectante por un desenlace que no solo busca justicia para el niño, sino también un mensaje claro contra todo tipo de abuso en la sociedad.