Judiciales y Policiales
Tenía domiciliaria

Persecución y recaptura: un fugitivo fue atrapado tras ataque a la Policía

Jorge Daniel Chirino, de 22 años, conocido en los círculos judiciales por su extenso historial de robos y hurtos, fue recapturado por la policía local tras escapar de su prisión domiciliaria.

En la fría madrugada del lunes catorce de octubre, la calma de la pequeña ciudad de Centenario fue interrumpida por un suceso digno de una novela de suspenso. Jorge Daniel Chirino, de 22 años, conocido en los círculos judiciales por su extenso historial de robos y hurtos, fue recapturado por la policía local tras escapar de su prisión domiciliaria. La historia de su captura es tan intrincada como los laberintos que recorrió en su corta pero intensa vida delictiva.

Chirino, quien cumplía prisión domiciliaria en la casa de su madre, ubicada en la calle Quinquela Martín, logró escabullirse el viernes por la noche sin llevar la tobillera electrónica, burlando la vigilancia policial. Su suerte se agotó en la madrugada de aquel lunes, cuando el azar y la diligencia policial lo llevaron nuevamente ante la justicia.

Todo comenzó alrededor de las dos y cuarenta de la mañana, cuando efectivos policiales, durante uno de sus patrullajes rutinarios por la calle Ástor Piazzolla, detectaron la figura encapuchada de un joven que caminaba de forma sospechosa. Al acercarse, lograron identificarlo y proceder a su detención.

El jefe de la comisaría 52 de Centenario, Abel Romero, informó que el individuo, cuyo plazo de prisión domiciliaria vencía el treinta de octubre, quedó nuevamente a disposición de la justicia. El viernes pasado, el prófugo había logrado burlar la vigilancia de la comisaría Quinta, desatando una intensa búsqueda policial. Al ser finalmente identificado, el joven reaccionó violentamente, atacando al personal policial con un arma blanca casera. Este incidente ha elevado la tensión en la comunidad, que sigue con atención el desarrollo del caso.

Según Romero, la justicia deberá ahora evaluar las medidas a tomar frente a la fuga y la agresiva reacción del individuo. La fuga inicial y el posterior ataque han puesto en evidencia fallas en el sistema de vigilancia y seguridad, lo cual requerirá una revisión exhaustiva para evitar futuros incidentes similares.

El joven, que había sido condenado a prisión domiciliaria, evidenció nuevamente la complejidad y los desafíos que enfrentan las autoridades en la supervisión de este tipo de sentencias. El uso de un arma blanca casera para atacar a los agentes subraya la peligrosidad del individuo y la necesidad de adoptar medidas de seguridad más rigurosas.

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