Las palabras se las lleva el viento: Gaido, en campaña, prometió políticas para el comercio, pero ¿cumplirá?
Tras las elecciones en la ciudad de Neuquén, donde Mariano Gaido se impuso como nuevo intendente a partir de diciembre, a las promesas parecen llevárselas el viento. Entre tantos mensajes, les dio un hermoso discurso a los comerciantes y ahora es preso de sus propias palabras.
Concretamente, los comercios de Neuquén esperan que el intendente electo, por el Movimiento Popular Neuquino (MPN), cumpla con su promesa de bajar las tasas impositivas municipales en un 50 por ciento. Una jugada arriesgada de parte del ministro de Trabajo, Desarrollo Social y Seguridad que, ahora, tendrá que cumplir.
Pero, lamentablemente, las prioridades del futuro jefe comunal parecen ser otras que, en comparación con la situación de crisis nacional y de las urgencias que esto implica, deberían ser de orden secundario en cualquier ámbito de gestión gubernamental.
Es que, según las últimas declaraciones de Gaido, el nuevo edificio municipal en el oeste neuquino, más precisamente en Godoy y Novella, pareciera ser la “gran” prioridad de la Municipalidad, cuyo inmueble aún no está terminado: es solo “un cascarón”, afirmó.
Mientras tanto, los comerciantes están calientes como pipa: "Se había comprometido a bajar el valor de las habilitaciones comerciales en un 50 por ciento”, protestó Daniel González, presidente de la Asociación del Comercio, Industria, Producción y Afines de Neuquén (ACIPAN). Quien estimó que cierra un comercio y medio por cuadra, y en total la cifra se eleva a casi 300 en el último tiempo, agobiados por la crisis.
Por otra parte, Gaido adelantó que su “despacho será en las comisiones vecinales y en cada institución. Sin embargo, las reuniones de gabinete y las oficinas estarán en el nuevo edificio”. Y, por último, reveló que el 15 de noviembre dará a conocer a los integrantes de su equipo de trabajo.
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