Esto terminó de alarmar a las autoridades que venían viendo una aceleración pronunciada de la curva y despertó particularmente la preocupación por el raquítico sistema de salud que no alcanza para todos los pacientes y se encuentra colapsado, desde hace unas semanas.

La situación hospitalaria es alarmante, con falta de tubos de oxígeno para aquellos pacientes que lo precisan, según reveló el director del CEMIC, Rodrigo Rabuffetti. O la postal del Hospital Heller donde dos personas estuvieron en camas en los pasillos de la guardia a la espera de una Unidad de Terapia Intensiva: “Esta va a ser la foto normal", afirmó su titular, Víctor Noli.

Por ejemplo, Andacollo se adelantó al anuncio de Omar Gutiérrez, y luego de la cadena nacional que llevó a cabo Alberto Fernández, decidió unilateralmente acatar la medida y restringir aún más ante la alarmante situación epidemiológica.

Por otra parte, al inicio de la semana, el lunes llegaron a la provincia de Neuquén 15 profesionales de la salud para atender las camas de terapia intensiva del Hospital de Zapala, debido a la falta de personal que ya es una constante desde que comenzó la pandemia. Se sumaron intensivistas, kinesiólogos y enfermeros y ya son un total 62 anexados al sistema público, en este último tiempo.

También el Hospital Castro Rendón, un tiempo atrás, vio una merma en su personal médico, debido a la renuncia de 5 de los 11 profesionales que acusaron estrés laboral y sobretrabajo, al tener que atender el doble de camas de lo recomendado. Luego incorporaron a otros tres terapistas, pero aun así, se está muy lejos de la cantidad de personal adecuada para afrontar la grave situación sanitaria.

En consecuencia, los fallecimientos van en aumento por dos grandes motivos, la segunda ola es más virulenta que la primera –a raíz de las nuevas cepas- e incluso ataca más fuertemente a los jóvenes, pero además, el sistema no da abasto y se encuentra saturado.

Debate político, de profesión y gremial

Esta frenética semana en relación a la salud, también tuvo la visita de la ministra nacional Carla Vizzotti, que llegó para anunciar en conjunto con Gutiérrez el pase a planta permanente de más de 500 trabajadores eventuales del sector, por lo que realizaron una conferencia.

Pero en medio de toda esta situación, esta semana se abrió otra importante arista en el mundo de los profesionales de la salud, debido a que el gremio Siprosapune y el Sindicato de Enfermeros de Neuquén dan pelea para lograr las personerías gremiales, pero sobre todo por la creación de la carrera profesional sanitaria.

Esto abre una grieta con ATE Neuquén, que dirige Carlos Quintriqueo, motivo que provocó la ruptura sindical tiempo atrás y el nacimiento de Siprosapune como gremio estrictamente de los médicos de la provincia, a diferencia del convenio colectivo de trabajo que abarca a todos los estatales en su conjunto.

En este sentido, la Legislatura de Neuquén puede a la brevedad poner fin a esta disputa interna entre ATE y el sector de salud, aunque ya Quintriqueo amenazó con un paro por tiempo indeterminado e iniciar acciones judiciales por “conducta desleal y antisindical”. Es decir que ve un poco amenazado y debilitado su poder como líder gremial, donde está enquistado desde hace años.

Por último, no menos importante, al igual que mencionamos semanas atrás, continúan los sumarios –¿y por lo tanto la política persecutoria?- a los trabajadores autoconvocados de la salud que llevaron a cabo una larga lucha por una recomposición salarial que finalmente fue otorgada a la totalidad de los profesionales del sector.