Martínez también aclaró que la cocina del establecimiento “está funcionando, no explotó, no estalló, no se inhabilitó ni se prendió fuego, fue una llamarada”. Actualmente, se está esperando el informe oficial para determinar qué ocurrió.

Por su parte, Luciano Saborido, director provincial de Edificios Escolares zona Confluencia del Ministerio de Educación, detalló que los directivos del establecimiento informaron sobre un olor a gas en el aula pre-taller a través del sistema SITMA. En respuesta, se activó el protocolo correspondiente para tratar la emergencia.

Saborido relató que la empresa encargada del mantenimiento asistió rápidamente y detectó que debía reemplazar el robinete de una hornalla. Al no tener el repuesto disponible, retiraron la pieza como muestra para comprarla. Durante este proceso, alguien operó la cocina, lo que provocó una llamarada.

El funcionario subrayó que, según la empresa, se avisó al director y a los auxiliares que no debían utilizar la cocina. Una vez que el repuesto estuvo disponible, el gasista matriculado lo instaló y todo quedó funcionando correctamente. “Fue un trabajo de rutina de mantenimiento”, indicó Saborido.

Ante la información difundida por la seccional ATEN capital sobre una docente supuestamente internada por intoxicación de monóxido de carbono, Saborido remarcó que la llave de gas estaba cerrada y que la empresa había avisado que no se podía usar la cocina. “Evaluaremos lo ocurrido como se realiza habitualmente”, afirmó.

Finalmente, señaló que, si se detecta que la empresa cometió un error, existen mecanismos para sancionarla. “En algún momento alguien operó un artefacto que estaba siendo intervenido. Hay que determinar quién fue. Nosotros vamos a poner bajo la lupa el accionar de la empresa. Si es sancionable, será sancionada”, concluyó.