Cuando la tormenta pase el barco seguirá enfilado su proa a las elecciones
Las fuerzas políticas, como olas coléricas, liberan su rencor, celos y sed de protagonismo, tejidos en la trama de los años y de muchas campañas políticas.
En los rincones de cada unidad básica, casita electoral o lugar de encuentro, los corazones laten como tambores, y el mar murmura secretos que solo el viento patagónico conoce.
¿Quiénes serán los verdugos? ¿Quién el mártir? La respuesta se oculta en las sombras, entre las urnas y la historia política de la provincia.
Cuando la tormenta gremial con ATEN pase, quizás encuentren redención, o naufraguen en las profundidades de sus propias internas algunos integrantes de la historia diaria de la gestión y del gobierno.
Queda claro que Rolando Figueroa no quiere ninguna sorpresa en el 2025 con el proceso electoral, por esa razón puso al frente del dialogo con ATEN a sus mejores espadas para apuntalar a la ministra de Educación, Soledad Martínez que venía en las últimas semanas con la línea de flotación algo comprometida.
La llegada al diálogo con el tema sobre reglamentación de la ley que incorpora el adicional salarial por presentismo del ministro de Gobierno, Jorge Tobares; y la titular de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres, Julieta Corroza fue una decisión que nació del consenso en el núcleo duro de Neuquinizate. Y eso demuestra cómo funciona la lógica del gobernador y como encamina a sus propios funcionarios siempre trabajando en conjunto.
La estrategia tanto de gestión como electoral Figueroa es de sumar y generar un frente vario pinto pero unificado. En este camino varios actores en el MPN auspician sumarse al gran frente provincial Neuquinizate que ya acumula a Comunidad donde se fusionan “Desarrollo Ciudadano” de la vicegobernadora Gloria Ruiz, al PRO, radicales, peronistas y al intendente de Neuquén capital, Mariano Gaido.
Varios referentes del sector Azul ligado a Jorge Sapag y Omar Gutiérrez dicen: “El respaldo del MPN el gobernador lo tiene. En la Legislatura, nuestro bloque aporta gobernabilidad y lo acompaña. Rolo es de Comunidad, pero lo acompañamos” se escuchó decir en los pasillos de la Legislatura. De esta forma queda claro que en Neuquén se gobierna y a la vez se piensa en las elecciones de segundo término que tendremos el año que viene y en donde la necesidad y el objetivo de los políticos regionales es de afianzar su poderío antes el caos partidario que propone el presidente Javier Milei y el núcleo duro de La Libertad Avanza que juega a discutir en las redes sociales sin darse cuenta que la territorialidad y el trabajo en el lugar es básico para construir poder.
Queda claro en estos días que Twitter o X es el ring donde se libran batallas verbales, se comparten ideas y se intenta moldear la opinión pública. Claro que, si se incrementan las acciones de maltrato, odio y persecución terminan de ser contraproducentes.
En el caso de Neuquén y de la gestión de Figueroa las expresiones coinciden con las acciones. Durante todo el semestre que pasó Rolando con su propuesta de la regionalización logró que las intendencias emepenistas empezaran a trabajar para consolidar el grupo que finalmente se denomina agrupación, “La 27”, de sólida raigambre en el interior profundo. Queda claro que Figueroa empezó a moldear la masa crítica camino a 2025.
Los tiempos de Neuquén parecen que son distintos a los que tienen en el resto del país.
La llegada de Javier Milei al sillón de Rivadavia trajo aparejado un modelo libertario que ha desgastado a todos los municipios, quienes se ven perjudicados por el ajuste en los fondos destinados a la obra pública o con tener que cubrir el precio del boleto de transporte de pasajeros u otras partidas que apaciguaban la demanda local. En Neuquén esta situación se ha podido apaciguar de la mano del gobierno provincial.
Queda claro que la sociedad está pensando en sobrevivir, lo que menos quieren escuchar es de política partidaria y por eso las internas en varios partidos están congeladas.
Como se sabe Neuquén pone en juego tres bancas en el Senado y tres en la Cámara de Diputados en 2025 y por ello la contienda se presenta con enormes complejidades. Evitar los conflictos internos que afecten el federalismo es el límite político es lo que define el día a día de cada reclamo gremial o social.