Clínica San Lucas: le amputaron con éxito la piernita a la beba quemada con un caloventor
Una gran indignación se vive por estas horas en la localidad pampeana de 25 de Mayo, luego de que una beba que nació prematura fuera quemada con un caloventor por los médicos del hospital Jorge Ahuad, minutos después del parto.
El hecho ocurrió el pasado 5 de abril e intentó ser ocultado por el personal del sanatorio, pero lo cierto es que el caso salió a la luz y tras 10 días, los esfuerzos por curarla fueron inútiles. Este jueves tuvieron que amputarle la piernita.
La beba sufrió quemaduras de segundo y tercer grado. La familia recién pudo ver las heridas cuando llegaron a una clínica de Neuquén, adonde la beba y su madre fueron derivadas.
La neonatóloga María Marta Morcillo, directora médica de la maternidad San Lucas de esa ciudad, confirmó que se debería amputar parte de la pierna de la pequeña llamada Victoria.
"El piecito ya lo perdió. La beba tiene asistencia respiratoria, está delicada en terapia neonatal. Se le hará cirugía en la pierna cuando se estabilice", había asegurado la profesional. Mientras que este jueves por la mañana, se realizó la operación con éxito.
En principio, se le amputaron los dedos y se le realizó un raspaje de la planta del pie, que fueron las zonas más afectadas y donde ya se había producido una necrosis (muerte celular). Con esta cirugía se buscó tratar de salvar el resto del pie y la pierna de la beba de 7 meses.
Los hechos
Victoria nació el 5 de abril pasado de madre primeriza con 31 semanas de gestación y en el hospital de la localidad de unos 11 mil habitantes situada en la zona del Alto Valle del Río Colorado, en el sudoeste pampeano, no contaban con equipamiento suficiente, por lo que una enfermera intentó asistir a la pequeña con un caloventor.
El director del hospital, Marcelo Güemes, justificó el incidente por las precarias condiciones del establecimiento y al relatar lo ocurrido dijo que mientras la médica que llevaba adelante el parto "canalizaba y entubaba" a la beba, se le colocó el caloventor "a 50 centímetros" y "se quemó, lamentablemente".
A su turno, la médica neuquina dijo: "La beba tiene toda la fuerza, la está luchando. Tiene antibióticos. Asistencia respiratoria de apoyo. Tratamos de que sufra el menor estrés posible. Todavía no ha podido alimentarse con leche, es a través de suero", y detalló: "Es un día a día como todo prematuro".