C.R.O: desde Chos Malal al mundo, el artista que desafía los géneros





El trap y el rock son muy parecidos, nada más que uno es más nuevo que el otro”, dijo en varias ocasiones Tomás Manuel Campos, conocido artísticamente como C.R.O. Nacido en Chos Malal, Neuquén este joven artista no solo ha sabido fusionar distintos estilos musicales, sino que también llevó el nombre de su ciudad natal a los escenarios más importantes del mundo.
C.R.O nació el 11 de septiembre de 1998 y creció en el corazón de la Patagonia, rodeado de paisajes que contrastan la dureza del viento con la belleza de sus montañas. Su infancia en Chos Malal estuvo marcada por la influencia de la música que escuchaba en su hogar, donde el rock y el hip hop convivían en armonía.
Desde temprana edad demostró una pasión por la rima y la improvisación, lo que lo llevó a participar en batallas de freestyle en Neuquén a los 14 años. Rápidamente, su talento lo hizo destacar y le permitió ganar reconocimiento dentro de la escena underground. Pero C.R.O no se conformó solo con el freestyle: su inquietud artística lo llevó a explorar la composición y la producción musical.
En 2014, bajo el nombre de Crackero, lanzó sus primeros sencillos, "Mi Manada" y "Otro Vago". Estos temas fueron su carta de presentación en el trap argentino, un género que en aquel momento comenzaba a expandirse en el país.
Un camino en ascenso
El verdadero salto de su carrera llegó en 2018 con el lanzamiento de su álbum debut "542". En este trabajo, C.R.O contó con la colaboración de artistas como Duki y Homer el Mero Mero, con quien formaría el dúo Bardero$. Este grupo se convirtió en un referente del trap y rap en habla hispana, consolidando su estilo crudo y directo.
A pesar de su raíz en el trap, C.R.O nunca se limitó a un solo género. Su capacidad de reinventarse y experimentar con distintos sonidos le valió el título de "el artista de los 100 géneros". Ha incursionado en el rock, la electrónica, el reggaetón e incluso ha fusionado elementos de música alternativa en sus producciones. Gracias a su versatilidad, ha trabajado con figuras de renombre como Bizarrap, Lit Killah, FMK, Kidd Keo y Neo Pistea.
Chos Malal, siempre presente
A pesar de su crecimiento y reconocimiento internacional, C.R.O nunca dejó de mencionar la influencia de Chos Malal y Neuquén en su vida y obra. Su tierra natal es más que un punto de origen; es parte de su identidad artística. En entrevistas destacó siempre la importancia de volver a su ciudad, de reencontrarse con sus amigos y familiares, y de mantenerse fiel a sus raíces.
El joven artista, que hoy cuenta con 2.9 millones de seguidores en su cuenta de Instagram, mencionó en distintas ocasiones cómo la Patagonia lo moldeó, tanto en lo personal como en lo profesional. "Allá tenés que aprender a hacer de todo, a rebuscártela", dijo en más de una oportunidad, reflejando la resiliencia y creatividad que lo caracterizan.
En 2022, durante un show en Buenos Aires, hizo una mención especial a su tierra natal, agradeciendo el apoyo de su gente y reafirmando su compromiso con la música argentina. De tanto en tanto se lo puede ver en el norte neuquino reencontrándose con amigos y familiares, incorporando eso que sólo el paisaje y la historia propia puede imprimirles a las personas en lo más profundo
Un futuro sin límites
Con una carrera en constante ascenso, C.R.O sigue explorando nuevos sonidos y desafiando los límites del género urbano. Su proyecto "Malos Cantores" demuestra su interés por la experimentación musical y su deseo de llevar la música argentina a nuevos horizontes.
Desde las calles de Chos Malal hasta los escenarios internacionales, su historia es un testimonio de perseverancia y pasión. Su legado crece con cada canción, recordándole al mundo que la Patagonia no solo es tierra de paisajes imponentes, sino también de talento inagotable.
C.R.O no olvida de dónde viene. Y mientras su música sigue expandiéndose por el mundo, su corazón sigue latiendo al ritmo del viento neuquino.