Resumidamente: la deuda que CALF reclama, asciende a 175.000.000 pesos (con intereses al 29 de agosto del 2023).

Los intereses están reglados por la ley de defensa al consumidor y en consecuencia el contrato de concesión. Pero, además, en los últimos 12 meses, por las facturas de energía a la fábrica, CALF recibió solo siete importes de 1.000.000 de pesos (7.000.000 de pesos) que representa apenas el 10 por ciento de la facturación emitida en un año.

Para CALF es inviable seguir sosteniendo la situación de deuda de la cerámica, y los NO pagos de las facturas mensuales. Hacerlo resultaría posicionar a CALF en una situación financiera CRITICA.

CALF es una COOPERATIVA distribuidora del servicio de energía eléctrica, y para brindarlo compra la energía a CAMMESA. Esto obviamente implica el pago en tiempo y forma a tal entidad.

No se está teniendo en cuenta que CALF está abonando hace meses a CAMMESA la factura por el consumo de energía que tiene la cerámica sin lograr el cobro y recupero de esos montos que está afrontando.

En suma, CALF bajo ningún concepto puede financiar el trabajo de una fábrica como lo hizo estos meses porque afecta las finanzas, la economía de CALF y pone en riesgo la estabilidad de esta Cooperativa, y la prestación del servicio a todos los usuarios.

De la buena administración de CALF dependen más de 470 familias y más de 100.000 usuarios por lo que es nuestra obligación velar por la estabilidad de la Cooperativa.

Sobre las tarifas y subsidios la cooperativa argumento que “se quiere dejar entrever que CALF es quien decide el régimen tarifario, desinformando de tal manera, ya que a esta altura todos somos conocedores que las tarifas no son establecidas por CALF. Somos una distribuidora de energía eléctrica que compra y vende energía a través de una concesión, y no decidimos el régimen tarifario ni nacional, ni municipal ni los subsidios que puedan disponerse desde el Estado”.

La Cooperativa viene acompañando desde hace años a la cerámica y a las familias que hacen a la cerámica (antes de la pandemia, en pandemia y post pandemia. Fruto de la voluntad de entender la coyuntura social en los distintos tiempos se fueron estableciendo diferentes acuerdos, los que fueron incumplidos.

Es evidente que para CALF, como para cualquier distribuidor de algún servicio o producto, existen límites propios de su naturaleza, y que de no atenderlos significaría perjuicios propios.

A diferencia de lo que sucede con otras distribuidoras del país, en CALF, hemos mejorado la calidad del servicio disminuyendo los cortes y dándole más confiabilidad al sistema eléctrico de la ciudad de Neuquén.

Con respecto a la Suspensión del Suministro, el mismo no fue realizado en forma sorpresiva o informal. Se formularon los correspondientes avisos de corte automáticos y en paralelo, desde hace varios meses se les informa de la situación por los canales habituales sin recibir respuesta alguna de la Cerámica. Con la suspensión lo que logramos es que la deuda no siga incrementándose.

CALF tiene un espíritu solidario y comparte los valores y principios Cooperativos, pero no puede ser confundido en sus obligaciones y responsabilidades como prestador del servicio de distribución de energía de la ciudad de Neuquén.

La Cerámica ha manifestado en CALF y en distintos medios de comunicación que buscan una solución de fondo al asunto energético en esa industria. Sostienen que la solución debería darse en conjunto con el Gobierno nacional, provincial o municipal y en esta línea es que CALF remarca que tanto las tarifas como los subsidios no están bajo su competencia.

CALF particularmente entiende la situación crítica pero no puede ir en detrimento de sus propias finanzas y no puede financiar el trabajo de la cerámica y sus familias. Su prioridad es el brindar el servicio en la ciudad, cuidar la calidad del servicio, garantizar la fuente laboral de trabajo de esta cooperativa y su estabilidad económica-financiera.

La Cerámica manifestó en la mesa de diálogo con CALF su imposibilidad de abonar el total de la factura mensual y las próximas que se emitan. Ofreció abonar parte de la factura mensual y entregar cerámicos como parte de pago.

Propuesta que para CALF es inviable. Además, y con respecto a la deuda, la Cerámica propuso realizar un pago inicial en material de 30 pallets de cerámicos y un pago mensual de cinco pallets para ir saldando la deuda.

CALF no se dedica a la venta de cerámicos ni es un material con el que podría trabajar en el brindado del servicio de energía eléctrica ni con el que podría abonarle a CAMMESA mes a mes por el consumo de energía eléctrica.

Aceptar la recepción de materiales en forma de pago habilitaría a todos los demás usuarios y usuarias a solicitar la misma condición de abonar sus facturas con bienes o cosas muebles, por lo que resulta inaceptable tal situación.

CALF históricamente y hasta la actualidad está al servicio de sus asociados y asociadas y busca las formas y mecanismos para abordar situaciones complejas que se generan a raíz de distintos motivos. La normativa que nos rige nos permite generar acuerdos de pago para las deudas, y la Cerámica no es la excepción.

Por ende, rechazamos tajantemente los dichos de miembros de la cerámica que han manifestado haber “arreglos internos”. Los y las asociadas en su totalidad tienen el mismo tratamiento y facilidades de pago, pero sin dudas entendemos necesario que, así como se han expresado en esos términos, aclaren a que se refieren y tomen la seriedad del caso que acontece.

CALF exige el cumplimiento de pago de las facturas actuales y habituales y un acuerdo de pago para lo adeudado a fin volver a brindar el servicio de energía a la Cerámica.

CALF (asociados/as, conducción y trabajadores/as) realizan una administración responsable en resguardo de la vida institucional, y esta es siempre la prioridad.