2023 se convierte en un año electoral donde el aspecto financiero aprieta el zapato de los gobiernos
Omar Gutiérrez y Mariano Gaido tienen un claro desafío de mantener las ecuaciones económicas claras y rentables para la mayor parte de las fuerzas productivas y políticas de la provincia y la capital. Ambos mandatarios trabajaron a pasos agigantados buscando cerrar los proyectos que enviarán a la Legislatura provincial como al Concejo Deliberante.
El gobernador Omar Gutiérrez sabe que la interna pública que Rolando Figueroa propuso por la lucha por el sillón de Calle Roca es extremadamente volátil y el centro de todo su discurso rondará sobre los recursos naturales y las riquezas que dejan los hidrocarburos que no tienen una distribución igualitaria ni el derrame que muchas veces se aseguran desde el ejecutivo provincial.
Para Gaido el tema pasa hacer pie en una fuerte inversión en obra pública, la promoción de acciones concretas en áreas claves de su gobierno y el fomento a la generación de empleo en el ámbito privado la cual será la línea directriz que comparte con Gutiérrez.
Fernando Schpoliansky, secretario de Finanzas del municipio, tiene un borrador donde el presupuesto municipal está compuesto en un 31 por ciento para el rubro personal, el 42 por ciento estará destinado a Obra Pública y sólo el 27 por ciento restante para gastos corrientes que le permiten cerrar con superávit.
En tanto que el ministro de Hacienda de la provincia Guillermo Pons, tuvo el gran desafío de ajustar números a pedido de Gutiérrez que tiene una fuerte base contable de ajustar recursos con el aspecto político que le permita dejar a Marcos Koopmann y Ana Pechen bien posicionado ante los electores en abril del 2023.
Gutiérrez tiene ya en su discurso diario en cada acto la idea de generar un presupuesto con grandes fondos destinados a la financiación de obra pública ligada al corredor de rutas provinciales que unen el sur con el centro y norte. Rutas e inauguraciones antes de que terminen sus ocho años de mandato parecen ser su objetivo político.
Otra de las patas de campaña la tendrá el ministro de Gobierno y Educación, Osvaldo Llancafilo a quien se le encomendó tener un fondo y un presupuesto que permita hacer obras escolares y mantenimiento de edificios y de esta forma lavar la cara de los accidentes constante que surgen en los establecimientos educativos que han llevado a la pérdida de vidas humanas.
Al igual que Educación, habrá una presencia importante en el Presupuesto de áreas como salud, seguridad y beneficios impositivos para los comerciantes y empresas del rubro de la construcción y del turismo. Menos tributos, más empleo es el pedido tanto de Gaido como de Gutiérrez con la atenta mirada puesta en las elecciones.
Gutiérrez envió su proyecto el pasado jueves mientras que Gaido lo hará el próximo lunes 31 de octubre. Esperamos que la sintonía de ambos proyectos no estén ligados a un Halloween en las próximas elecciones. En tanto que el arco político opositor se mueve, una vez más, al ritmo de la música que impone el Movimiento Popular Neuquino (MPN).
Como el factor económico parece ser la vara que mide el proceso electoral todos se preguntan si: “¿Es esta la interna abierta de Vaca Muerta?”. Interrogante que puede ayudar a analizar cómo se acomoda el principal factor de poder económico de Neuquén en su estrecha relación con el político que toma las decisiones.
Al MPN, en cualquiera de sus variantes, le queda cómodo decir que "el centralismo porteño" quiere quedarse con Vaca Muerta, un insufrible sentido de la propiedad que las provincias petroleras utilizan a discreción desde que se aprobó la llamada "ley corta" de hidrocarburos.
Se trata de una narrativa que construye un adversario político al que se lo puede criticar con mayor facilidad que a las empresas petroleras, aliadas de primer orden. Ni Koopmann ni Figueroa, ni Ramón Rioseco y menos el devaluado Darío Martínez, en caso de gobernar la provincia, modificarán esta lógica de gestión arraigada en el partido provincial.
Solo Pablo Cervi parece aún no definido en el entorno nacional sí puede acelerar para llegar a la meta de poder gobernar la provincia y tener un claro camino sobre cómo definir el esquema económico de la provincia.