Esta actividad ganadera consiste en arriar los “piños” (grupo de cabras criollas) a las zonas más aptas para su subsistencia, de acuerdo a las estaciones del año y a la variación del clima.

Puede realizarse por arrieros solos o acompañados por toda su familia, ya que las estadías en las distintas zonas pueden darse por meses. Los grupos familiares deben ajustarse a este movimiento estacional.

La Dirección provincial de Seguridad Vial emitió una serie de recomendaciones para automovilistas que transiten por las rutas, en especial las del norte de la provincia.

Las medidas que deben tomar quienes se encuentren con piños de animales en rutas son: esperar a que los animales avancen y se corran hacia algún lado de la banquina para dejar pasar a los vehículos; no se debe tocar bocina, ya que eso asusta y dispersa a los animales; y transitar a baja velocidad y con luces encendidas.