El gobernador de la provincia, Omar Gutiérrez, se ha reunido en varias oportunidades con el ministro de Hacienda provincial, Guillermo Pons; para analizar las distintas variables económicas nacionales e internacionales y las consecuencias que podrían recaer sobre las finanzas públicas provinciales.

La evolución del IPC y el acuerdo salarial de mantener atadas ambas variables que se acordó hace tiempo con los gremios hace que se realicen simulaciones futuras de los incrementos salariales. Tal situación genera preocupación en el gobierno para ver cómo se puede cumplir con el compromiso en el próximo semestre.

En las oficinas de casa de gobierno se escuchó decir “Ya no se puede seguir con una economía nacional descontrolada, los incrementos salariales se van a llevar casi el 90 por ciento del presupuesto provincial de 800 mil millones de pesos estimado para este año, hay que disponer medidas específicas para contener el gasto”.

No solo los ámbitos ejecutivos y legislativos han hecho sonar las alarmas, en el Superior Tribunal de Justicia, las autoridades marcan su preocupación sobre la situación de las finanzas del Poder Judicial. Al igual que el Poder Ejecutivo Provincial, más del 95 por ciento del presupuesto de funcionamiento de este año estará financiando la masa salarial de empleados y funcionarios judiciales. Recordemos que el presupuesto aprobado orilla los 41 mil millones de pesos.

Queda claro que hoy entre el traspaso de gestión de Gutiérrez a Figueroa y el desarrollo económico del país ha dejado que todo lo planificado esté parado y solo los contadores de cada área estén trabajando en asegurar los salarios de los empleados para evitar el conflicto social.

Con los balances en rojo y un escenario de disputa en el orden nacional hace pensar que varios organismos tengan un próximo semestre casi desfinanciados. Ya es claro que salud, seguridad y educación están con la línea de flotación comprometida.

Distintas versiones indican que, de profundizarse la crisis económica nacional, el gobierno neuquino podría llegar a declarar la emergencia económica de modo de readecuar partidas presupuestarias privilegiando las urgencias del momento. Es claro que la preocupación de Gutiérrez y su entorno es de lograr mantener la calma social en este proceso de extensa transición y se han comenzado a bajar varios proyectos que se tenían en el ámbito ejecutivo como legislativo.

En lo que respecta al plano político electoral aún quedan varios municipios sin definir sus autoridades mientras que Rolando Figueroa es muy cuidadoso al hablar del MPN, partido al cual se referencia y al que en voz baja se identifica. Queda claro en este mes poselectoral que se siente del MPN y que lo que pasó el 16 de abril es que le ganó al sector Azul.

En lo inmediato, el grupo cercano al electo gobernador apostará a las elecciones próximas en Plaza Huincul - Cutral Co que ahora están en manos del MPN y del Frente y la Participación. Quizás lo hagan pensando en seguir planteando su victoria sobre un sector del MPN, pero sin alejarse de las bases del partido que lo vio nacer en Chos Malal a la vida política.