Así lo dispuso el gobernador Rolando Figueroa y, en función de ello, este miércoles se concretó la primera reunión. Fue en Pincún Leufú y participaron tanto miembros del Gabinete provincial como jefes comunales de los municipios de la región Limay Medio. La premisa de ordenar para redistribuir y el objetivo de lograr el desarrollo equitativo y equilibrado, tienen su correlato en la decisión de que las políticas de Estado no se resuelvan detrás de un escritorio, sino cerca de sus destinatarios.

“De la mano de la regionalización priorizamos las obras y los ejes de la gestión que llevaremos adelante durante los próximos años, en este caso en la región Limay Medio, a partir de la línea trazada por el gobernador”, sostuvo el ministro Jefe de Gabinete, Juan Luis Ousset. Y reforzó: “Las decisiones se toman a partir del diagnóstico y las estadísticas, no en función del concepto que maneje un funcionario desde un escritorio”.

Tras la eliminación de gastos innecesarios del Estado y de las medidas de austeridad que permitieron reforzar las partidas presupuestarias de áreas esenciales (y que de hecho se mantienen), la gestión de gobierno entró en una nueva etapa y se fijó nuevos objetivos. Uno de ellos es, precisamente, la incorporación de obras al Presupuesto.

Además de Ousset, participaron la ministra de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres, Julieta Corroza; la intendenta anfitriona, Perla Díaz; y sus pares de Piedra del Águila, Julio Hernández; de Santo Tomás, Víctor López; de Paso Aguerre, Marcelo Pino; y de El Sauce, Edgardo Torres; como así también el delegado regional, Sergio Epullán.

“El gobernador tiene por objeto escuchar los planteos de las localidades y estar mucho más cerca; ser mucho más eficientes y también darle voz a aquellos que muchas veces no pueden ser escuchados”, señaló Ousset. Y explicó que el objetivo también radica en “plantear diagnósticos regionales ver cuáles son las políticas públicas que tienen mayor impacto, cómo distribuir mejor los recursos, cómo llevar oportunidades a todos los lugares y ser responsables con el uso de recursos que son finitos, para poner en marcha una provincia mucho más justa”.

Por su parte, Corroza señaló que “este tipo de obras tienen que estar consensuadas, no solamente con cada localidad, sino pensadas de manera regional, para poder optimizar el recurso; y eso podemos determinarlo en este tipo de encuentros que creo que son muy productivos para acercarnos a las realidades de cada localidad”.

La ministra recordó, además, que la nueva etapa del gobierno neuquino puesta en marcha por el gobernador Figueroa “radica en imprimirle celeridad a su objetivo de lograr el desarrollo equitativo y equilibrado de cada una de las regiones”.

La experiencia se va a repetir en cada una de las regiones, con la participación de jefes comunales y delegados regionales que harán escuchar las voces de los vecinos.