El gobierno de la provincia que asumirá el 10 de diciembre incorporará una cantidad importante de diputados y diputadas electas, hecho que cambiará la conformación de la Legislatura.

La diputada Leticia Esteves (PRO), que había conseguido la renovación de su banca, dejará ese lugar para transformarse en la próxima secretaria de Planificación y Vinculación Institucional del Ejecutivo a cargo de Rolando Figueroa. En su lugar asumirá Verónica Lichter, dirigente de Villa La Angostura y primera suplente en la lista.

Por otro Lucas Castelli que ganara su lugar por Avanzar Neuquén ya fue designado como ministro de Trabajo y Desarrollo Laboral y por lo que en la legislatura lo reemplazará el tercero por paridad de género, Francisco Lepore, ya que la segunda de la nómina era Ana Servidio.

Recordemos que en el caso de la legislatura provincia además se registraran otros cambios, Nadia Márquez dejará su lugar para ocupar su estaño como diputada nacional en el Congreso de la Nación, a partir del triunfo logrado con su partido Arriba Neuquén en apoyo a Javier Milei, en las elecciones del 22 de octubre. Su lugar será ocupado por Giselle Stillger.

En este recuento de como se conforma el mapa político de la provincia tanto puertas adentro como hacia el resto del país, el partido Comunidad, realizara un enroque en el caso de la diputada electa de Luciana Ortiz Luna quien formara parte del gabinete de Rolando Figueroa a cargo de la nueva Secretaría de Emergencias y Gestión del Riesgo. La banca por el bloque de Comunidad que dejará Ortiz Luna será ocupada por Mónica Guanque.

No solo en el orden provincial esta situación a modo de espejo se ve reflejada entre nación y Neuquén, sino que además como una cascada desciende esta modalidad en algunos municipios. En el caso del gobierno municipal de la capital algunos acomodamientos se van dando entre el ejecutivo con el Concejo Deliberante capitalino.

El intendente Mariano Gaido anunció la creación de la jefatura de Gabinete, que estará a cargo de María Pasqualini, quien también seguirá a cargo de la secretaria de Cultura, Capacitación y Empleo, y que había sido electa como concejal de la ciudad por el MPN.

Otro caso de un funcionario que había logrado una banca en el Deliberante y que dejará ese lugar para continuar en el Ejecutivo de la capital es el de Gastón Contardi que representa a Confluencia Neuquina.

La lista, detrás de Contardi, la completan Romina Miranda (funcionaria vinculada con la creación del Polo tecnológico), Cristian Haspert (subsecretario de Limpieza Urbana de la Municipalidad), Marcela Cardelli (funcionaria de la secretaría de Gobierno) y Mauro Espinosa (subsecretario de Transporte).

Como los reemplazos deben ser por género, el lugar de Contardi debería ser de Haspert, pero éste ya fue conformado por Gaido como presidente del Comité de Urbanismo y Ciudad Sustentable, cuando comience el segundo mandato del intendente el 10 de diciembre.

Por esta razón, la banca le correspondería a Espinosa, pero éste también continuará en el Ejecutivo municipal. La idea, según trascendió, es encontrar una herramienta legal para que el lugar sea para una mujer y que Romina Mirando se consagre concejal.

En lo que respecta al ordenamiento de los poderes políticos de la provincia en el poder judicial se despidió noviembre con la aprobación de los pliegos de Juan Ignacio Guaita, Luciano Hermosilla y Juan Manuel Kess, como postulantes para jueces penales del Colegio de Jueces de la I Circunscripción Judicial. Si llamo la atención que varios legisladores se preocuparon por el tema de la proyección de un eventual agravamiento de la conflictividad social.

En las entrevistas “personales”, capítulo del examen parlamentario considerado clave para aprobar pliegos de jueces, se hizo una pregunta que, evidentemente, tiene que ver con el nuevo contexto político surgido de la victoria de La Libertad Avanza en el balotaje del domingo 19. Los diputados de la comisión preguntaron por “la criminalización de la protesta”, un concepto sugestivo y lleno de subjetividad, y que evidentemente conecta con una realidad auspiciada por el capítulo de “resistencia” que diversos sectores políticos y sociales han anticipado antes de la asunción del nuevo gobierno.

En medio del vértigo nacional, por el que desfilan ministros y secretarios futuros a alta velocidad, confirmados y des-confirmados, en una muestra casi ansiolítica de la política argentina que se encuentra en un proceso de ebullición que nunca se vivió en esa intensidad que se transfiere en todos los órdenes fuera y dentro de la provincia.