El sillón del gobernador: las primeras cartas para la sucesión
La sucesión del sillón en la Casa de Gobierno para 2023 comienza a mostrar indicios de cuál podría ser el panorama electoral para elegir al próximo reemplazante de Omar Gutiérrez, a pesar de que restan aún casi dos años.
El Movimiento Popular Neuquino (MPN), como siempre, es el principal favorito a quedarse nuevamente, como desde 1966, con la Gobernación de la Provincia de Neuquén. Sin embargo, internamente empiezan a verse disputas por el traspaso de poder.
Recordemos que, además, este año 2022, habrá renovación de autoridades partidarias en el MPN, por lo que el sector que resulte ganador quedará muy fortalecido de cara a las elecciones de 2023.
En este marco, el ex líder del sindicalismo petrolero e histórico referente, Guillermo Pereyra, comienza a meterse de lleno en la política interna del partido. Si bien siempre estuvo presente con su lista Azul y Blanca, desde que dejó el sindicato petrolero parece decidido a pisar más fuerte en el MPN.
Es así que el referente buscará mayor protagonismo este y el próximo año en el partido. Hoy Pereyra se muestra como un aliado de Gutiérrez y de los Sapag, pero el día de mañana el gobernador obligadamente dará un paso al costado (ya transita su segundo mandato consecutivo) y el sector petrolero quiere acomodarse en la política provincial, sobre todo para favorecer la explotación de Vaca Muerta.
Pero la intención de Pereyra no parece ser la del enfrentamiento: no estaría en sus intenciones romper con la conducción partidaria sino que, al contrario, busca fortalecerla, a diferencia del real opositor interno: Rolando Figueroa.
El ex vicegobernador de Gutiérrez tuvo claras diferencias con el actual mandatario, motivo que lo sacó de la Casa de Gobierno y lo llevó a una interna en 2019 donde no le alcanzó, pero sacó un 30 por ciento de los votos. Todo un indicio para lo que sucedió después.
En 2021, casi por la ventana presentó su precandidatura a diputado nacional enfrentando al sector sapagista y ganó las PASO que lo depositaron hoy en el Congreso nacional, pero las aspiraciones de Figueroa no están en Buenos Aires, sino en Neuquén por lo que será el rival más fuerte de cara a 2023 para Gutiérrez y compañía.
Por otra parte, el macrismo neuquino ya empieza a mostrar sus primeras cartas. Es que el diputado ultraderechista Francisco Sánchez del PRO, ya se probó el traje de candidato a gobernador con aval de Patricia Bullrich, presidenta del partido y referente del sector más duro conocido como “los halcones”.
Esto no significa que Sánchez no vaya a tener competencia interna porque, como se conoce en todo el país, el radicalismo está decidido a pisar fuerte en los próximos armados de Juntos por el Cambio, a diferencia de lo ocurrido en 2015 y 2019. Pablo Cervi fue recientemente electo como diputado y ganó la interna macrista en Neuquén. ¿Será, quizás, su competencia? Aún resta mucho tiempo…
En cuanto al Frente de Todos de Neuquén, hoy el panorama no parece estar muy claro. Recordemos que en las últimas elecciones legislativas, el kirchnerismo se ubicó como la tercera fuerza de la Provincia, tras el MPN y Juntos por el Cambio.
Además, vale destacar algo que no es menor: el peronismo atraviesa una fuerte interna entre el albertismo y el kirchnerismo a nivel nacional. Hoy por hoy, se están sacando los ojos entre ellos, agravándose la situación con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Esto indudablemente repercute también en Neuquén.
Quizás Darío Martínez, por ser una figura joven que hoy está desempeñándose como secretario de Energía de la Nación, pique en punta para candidatearse como gobernador, probablemente con el aval de Cristina Kirchner y un viejo referente como Oscar Parrilli. No obstante, el futuro del Frente de Todos es realmente incierto.
Por otra parte, aparece la cuarta fuerza que logró consagrarse en las últimas elecciones en Neuquén. Se trata de la Coalición Cívica que hizo “rancho aparte” de Juntos por el Cambio en la Provincia y presentó como candidato legislativo a Carlos Eguía. El objetivo de los “lilitos” será intentar superar al kirchnerismo y parece muy lejana –siendo realistas- la idea de quedarse con el sillón del gobernador.
Por último, otra importante cantidad de partidos asoman para candidatearse como posibles sucesores de Gutiérrez, aunque en el termómetro popular estén lejos de recaudar votos. Entre ellos aparecen el sobichismo con Democracia Cristiana, los partidos de izquierda y Libres del Sur, con Jesús Escobar como referente local, quienes habitualmente figuran en las boletas.