Así, a lo largo de estos años, quedó demostrado su impacto positivo en las y los recién nacidos que se encuentran en la Terapia Neonatal de dicho hospital, como en las de toda la provincia.

“Quiero felicitar al equipo del Castro Rendón como a los de la Red de Leche Humana del Neuquén y el Banco de Leche Humana del Neuquén por el importante trabajo que realizan día a día, y agradecer además a todas las personas que amamantan y se suman a esta gran y valiosa cadena solidaria de donar leche humana. Un gesto individual de impacto colectivo que fortalece la salud infantil y el desarrollo de muchas niñas y muchos niños en la provincia”, reconoció la ministra de Salud, Andrea Peve.

En este sentido, la médica neonatóloga, Adriana Borghi, jefa del sector de Terapia Intensiva Neonatal del Hospital Castro Rendón detalló: “Nuestro servicio es el de mayor complejidad del Sistema de Salud Público (de Neuquén), en el atendemos a bebés que son menores de 1.500 gramos, 1.000 gramos, 800 gramos, que son recién nacidos prematuros y también aquellos bebés que si bien son más grandes de término nacen muy enfermos. Algunos –continuó- con problemas de corazón, cardiopatías congénitas que requieren cirugías mayores, pacientes con enfermedades gastrointestinales que también requieren cirugía, muchas malformaciones gastrointestinales, pacientes neuro-quirúrgicos, que son aquellos pacientes que tienen problemas a nivel de sistema nervioso central, que a veces también requieren cirugía. Todos esos pacientes se atienden en nuestro servicio, indicó”.

Asimismo, Borghi reflexionó sobre el impacto de la incorporación de la leche humana pasteurizada como alimento para bebés internados/as en el sector y afirmó: “El impacto es notable, hay muchas enfermedades que han disminuido en su frecuencia y otras prácticamente desaparecieron”.

La neonatóloga explicó que iniciar esta alimentación fue un cambio. “Fue un cambio que haya sido con leche humana y no leche de vaca. Con la leche humana nosotros hemos visto que toleran mejor la alimentación, que uno puede progresar más rápido esta alimentación, que estos bebitos se sanan más rápido, la verdad es esa, tienen menos días de internación, se pueden ir más rápido a su casa”, indicó con gran satisfacción la médica.

Además, Borghi aclaró: “Nunca podemos pretender que la leche de un animal tenga los mismos componentes que la leche de una mamá. La leche humana no es simplemente un líquido que uno le da a un bebé. La leche humana es un tejido, tiene muchos componentes, y dentro de sus componentes tiene células que se pueden transformar en diferentes tipos de células. Entran al

organismo del bebé y se transforman en células que pueden ir a cualquier lado que haya que reparar”.

Y una vez más, la neonatóloga sostuvo que “el cambio para nosotros ha sido increíble”, ya que una enfermedad que es muy común en las y los recién nacidos, prematuros en especial, es la enterocolitis necrotizante, la cual antes de 2016 tenía mucha incidencia mientras que actualmente “la incidencia es prácticamente nula”.

Algo similar ocurrió con las intolerancias alimentarias, lo que implicaba más días de internación, medicación y separación de las familias. “Con la incorporación de la leche humana pasteurizada, estos bebitos ya no tienen intolerancia alimentaria. Un bebito de 800 gramos se empieza a alimentar primero con gotitas, con pequeñas gotitas en sus carrillos, 0,5 mililitros, y después si tolera eso con el tiempo 1 mililitro y así hasta que el bebé come la toma completa. Eso para nosotros es increíble, lo vemos todos los días y la verdad que nos llena de felicidad”, agregó.

Un pequeño gesto

En referencia al lema de este año, “Un pequeño gesto puede alimentar un gran sueño”, Borghi explicó que una pequeña gotita (de leche) que una persona dona con mucho amor les llega a bebés que no pueden amamantar, porque están muy enfermos o son muy prematuros, desde su primer día de vida.

“Soy mamá de dos bebés prematuras que estuvieron un mes internadas en este Servicio. Ellas recibieron leche humana pasteurizada, mejoraron un montón su tolerancia y ahora las tengo conmigo y son mi gran sueño. Para mí ese pequeño gesto de la persona que donó leche, es mi gran sueño, que son mis hijas”, afirmó con emoción la neonatóloga, que vivió en primera persona la importancia de este gesto.

Centro de lactancia

El Hospital Castro Rendón cuenta con un Centro de Lactancia, un espacio en el que confluyen la estimulación de la lactancia natural y la posibilidad de donar leche humana al Banco de Leche Humana. Al respecto, la licenciada en enfermería y jefa de Servicio del Centro, Elma Castillo, explicó: “En el Centro de Lactancia recibimos y atendemos a todas las madres que tienen a su bebé internado dentro del neo, mamás que vienen a estimular la lactancia porque a veces no tienen mucha producción”.

También indicó que atienden a personas que están amamantando, que tienen mucha producción de leche, y que por distintas razones el bebé no se está alimentando. “En esos casos recolectamos la leche y se le pregunta (a la persona) si quiere ser donante”, agregó Castillo.

“Ser donante es muy sencillo”, afirmó Castillo y señaló que cualquier persona que esté amamantando puede serlo, para lo cual desde el equipo se le brinda el conocimiento necesario para que puedan realizar la extracción de leche en su domicilio, se firma un consentimiento informando aceptando la donación y se le realiza un laboratorio muy sencillo.

Una vez que la persona que está amamantando (en buen estado de salud) recolecta los excedentes de leche en su domicilio, de acuerdo a las recomendaciones, puede contactarse con cualquiera de los 48 nodos existentes en la Provincia para coordinar el retiro o entrega. En la Ciudad de Neuquén, por ejemplo, funciona un Centro Recolector en el Hospital Bouquet Roldán.

Para mayor información contactarse con el Banco de Leche Humana, a través del WhatsApp +54 9 299-4066430 o Facebook “Banco de Leche Humana Neuquén”, o con cualquier institución que integre la Red de Leche Humana Neuquén.