“Es criminal rematar una fábrica que está funcionando y produce los ladrillos y cerámicos para construir las más de 80 mil viviendas que se necesitan en la Provincia”, sostuvo el secretario adjunto del gremio ceramista, Andrés Blanco.

“Desde diciembre del año pasado existe un preacuerdo firmado por todas las partes, incluyendo a los ex trabajadores, empresarios y la gestión obrera, que da respuestas y contempla a todos los actores involucrados. Estas provocaciones intentan romper ese preacuerdo y evitar una solución que contemple a todos, intentando sacar beneficios para un sector", denunciaron los ceramistas.

Por otra parte, Libres del Sur sumó su apoyo: “Nos solidarizamos con los trabajadores y trabajadoras para defender las fuentes de ingreso de 80 familias neuquinas. Los trabajadores producen 40.000 metros cuadrados de cerámicos al mes. El gobierno y los patrones quieren desalojar la fábrica y rematarla”, dijo Jesús Escobar.

Por último, también una delegación de los trabajadores ceramistas fue con intenciones de ser recibida por la Comisión de Trabajo de la Legislatura de Neuquén para discutir y buscar una salida a esta problemática.